Preguntas Frecuentes
El látex es un material que se obtiene a partir de la savia extraída del árbol Hevea Brasiliensis o árbol del caucho. El látex es el jugo blanco o amarillento que circula por los vasos de este árbol. Es un líquido lechoso o resina que es abundante hasta los 25 años de edad del árbol.
El latex se obtiene sangrando el tronco mediante incisiones angulares en V. Por esta pequeña herida fluye el flujo lechoso, el cual se recoge colocando una pequeña vasija en el tronco del árbol. Es importante saber que el látex es una secreción inservible del árbol y cuanto más se extrae tanto más la planta se regenera, con lo que resulta siempre beneficioso para el árbol.
Para que sea natural y/orgánico, necesita ir debidamente certificado. Un látex natural no necesariamente es orgánico. Para ser orgánico debe tener las certificaciones correspondientes que lo acrediten.
El látex de nuestros colchones se extrae de bosques de intervención controlada en los que se cuida el terreno utilizado para evitar la deforestación.
El látex se obtiene sangrando el tronco mediante incisiones angulares en V. Por esta pequeña herida fluye el flujo lechoso, el cual se recoge colocando una pequeña vasija en el tronco del árbol.
Para que sea natural y/orgánico, necesita ir debidamente certificado. Un látex natural no necesariamente es orgánico. Para ser orgánico debe tener las certificaciones correspondientes que lo acrediten.
El látex de nuestros colchones se extrae de bosques de intervención controlada en los que se cuida el terreno utilizado para evitar la deforestación. Ver video aquí
Como con cualquier material natural, se han observado reacciones alérgicas que oscilan en el personal médico entre un 3 y un 10%, por uso de guantes y materiales clínicos.
Pero esta reacción alérgica es inexistente con respecto a los núcleos de colchones. En la literatura médica no se ha presentado ningún caso de alergia a raíz de dormir en un colchón de látex.
Los principales motivos por los que no existe ésta reacción alérgica son:
– El núcleo del colchón de látex se lava profusamente.
– Las proteínas causantes de las alergias son desnaturalizadas mediante las altas temperaturas a las que el núcleo es sometido en el proceso de vulcanización.
– El núcleo del colchón está protegido por una capa de algodón y luego con una funda extraíble, que impide el contacto directo del núcleo con la piel.
Todo lo contrario, el colchón de látex es especial para personas alérgicas, ya que el látex orgánico es antimicrobiano, antibacteriano y a prueba de ácaros del polvo.
Por otra parte, al ser un colchón orgánico, está libre de químicos que pueden ser fuente de alergia.
El látex orgánico es un material en el que los ácaros no anidan, no los repele ni los elimina, simplemente el ácaro no se encuentra a gusto en el látex y tiende a evitarlo. ¡Así es que un colchón orgánico es especial para personas alérgicas!
Los ácaros del polvo pertenecen a la familia de la araña; son translúcidos, tienen ocho patas y son microscópicos. Los ácaros del polvo pueden poner hasta 100 huevos al mes y prefieren lugares oscuros y húmedos para reproducirse; por eso el colchón es un lugar ideal. Se alimentan de nuestras células muertas que desprende el cuerpo y luego defecan (que es lo que causa la alergia) y las heces se acumulan en el interior del colchón.
Un solo ácaro puede producir hasta 2.000 unidades de materia fecal en un período de 10 semanas. Aunque no lo creas, tu colchón puede llegar a pesar el doble de lo que pesaba originalmente dentro de 10 años debido al polvo y a las heces de los ácaros!
Nuestros colchones NaturalDream tienen una funda lavable, que recomendamos NO lavar ni secar a más de 60 grados. Además está hecha de algodón orgánico, material no les gusta mucho a las ácaros ya que no mantiene la humedad.
Un buen colchón de látex es una excelente opción para los que sufren de alergias, ya que el núcleo de estos tipos de colchones no es hueco, no existe el efecto incubadora, y no hay un lugar en el que los ácaros del polvo puedan vivir. Además no hay una cavidad abierta en la que se puedan acumular alérgenos.
Por el contrario, los colchones de resortes son los menos favorables para las personas que tienen alergias debido a su sistema interior de resortes. La cavidad interna de los colchones de resortes crea una incubadora para los ácaros del polvo y allí se acumulan las heces y las células muertas de la piel de los ácaros del polvo.
Además, el látex orgánico es antimicrobiano y antibacteriano de manera natural (sin necesidad de agregarle químicos), lo que lo hace perfecto para las personas alérgicas!
El algodón es la fibra natural más utilizada en el mundo. Por lo general tiene una imagen limpia y sana, pero es uno de los cultivos que más depende de sustancias químicas en el mundo. Si bien el algodón representa sólo el 2,4% de los cultivo del mundo, consume el 10% de todos los productos químicos agrícolas y el 25% de los insecticidas, cuando solo el 3% de las tierras agrícolas del mundo lo cultivan.
De ahí la importancia de que sea orgánico. ¿Y qué significa que sea orgánico? Significa que es cultivado sin productos químicos, fertilizantes sintéticos ni pesticidas.
Para que su producción se considere como tal, tiene que estar certificada por organismos independientes siguiendo las normas y disposiciones vigentes. El algodón orgánico certificado por entidades independientes, garantiza la trazabilidad del proceso de producción. La certificación GOTS (Global Organic Textile Standard) es una de las más estrictas para el algodón orgánico.
Para cultivar el algodón orgánico se utilizan prácticas naturales como la rotación de cultivos o abonos animales en vez de fertilizantes artificiales. El control de plagas es mediante métodos cien por ciento biológicos como autóctonos o insectos, no permitiéndose utilizar insumos externos como fertilizantes químicos, herbicidas, pesticidas sintéticos ni semillas modificadas genéticamente.
Además, sus fibras naturales sin carga para su posterior procesamiento, sin el uso de sustancias nocivas para el medio ambiente como formaldehído, compuestos de cloro, etc.
Por último, el algodón orgánico se recolecta a mano para evitar defoliantes como los que se utilizan en el algodón convencional, ya que al recolectarse mediante máquina se tiene que rociar la plantación con herbicidas químicos para que las hojas se caigan antes de su recolecta.
La fibra de coco es un material completamente natural y ecológico. Se obtiene a partir de la cáscara del coco, preparada para sufrir el impacto cuando el fruto cae desde el árbol. Cada árbol cocotero da entre 60 y 120 frutos por temporada.
Para obtener la fibra de coco apta para relleno de colchones hay que seguir un proceso largo y laborioso. Comienza con la recolección de los cocos sobre un mes antes de su punto de maduración. Después se remojan en agua (dulce o salada) en un periodo que puede ir de varias semanas a varios meses. Tras esto, las fibras se separan de forma manual del fruto. En este momento la fibra de coco se asemeja al heno, y ha de ser sometida a otros procesos.
Se puede producir fibra de coco prensada (de menos calidad) o fibra de coco impregnada con látex natural. Así, se obtiene un material elástico y resistente a la deformación.
El lino es la fibra textil más antigua de la historia de la humanidad. Se caracteriza por su resistencia, versatilidad, su conducción del calor, la sensación que produce de frescor y por no retener olores. El lino orgánico (también con certificación GOTS) es suave y duradero, se elabora a partir de lino cultivado ecológicamente, sin pesticidas y se procesa sin usar substancias químicas peligrosas o dañinas para el ser humano ni para el medio ambiente. El lino ha sido siempre considerado un tejido fresco.
NO es lo mismo. Que un producto sea natural, es decir, que provenga de la naturaleza, no implica que también sea orgánico. En particular, ésta es una diferencia importante a la hora de saber distinguir entre los productos verdes genuinos y los que simplemente se disfrazan de “naturales” para hacerlos pasar por tales.
Por ejemplo, las frutas son alimentos naturales por ser frutos que proceden de un cultivo, pero esos mismos productos pueden ser transgénicos, estar sometidos a un tratamiento de pesticidas, incluir aditivos o recibir abono químico, lo que significaría que no podemos catalogarlos como orgánicos.
Estar atentos a esta diferencia resulta clave a la hora de elegir, sin dejarse confundir por definiciones ambiguas que intentan esconder lo realmente importante, como son los certificados independientes que garantizan la cualidad ecológica de un determinado producto, ya sea un alimento o cualquier otro.
Al mismo tiempo, hay que advertir que un producto puede ser parcialmente orgánico, lo que supone que una parte del mismo no lo es, según ha de constar en la etiqueta. Tal vez sea orgánico en un bajo porcentaje. Exige la información y certificaciones correspondientes, es tu derecho.
Tratándose de nuestros colchones , la altura del colchón NO tiene relación con su calidad. Lo que importa en un colchón NO es su altura, sino su composición. Por eso es tan importante preguntarse ¿De qué está hecho mi colchón?
Estamos acostumbrados a colchones muy altos, que para nuestro punto de vista traen más desventajas que beneficios.
En efecto, un colchón más bajo tiene muchos beneficios prácticos, por ejemplo, que el colchón sea más bajo hace que el dormitorio donde está la cama no se achique, y que las sábanas y cobertores caigan más para los dos lados de la cama, entre otras cosas.
Otro error es pensar que la densidad afecta la sensación. Falso.
La densidad del látex en realidad tiene poco que ver con la sensación que brinda el colchón y tiene más que ver con su soporte al peso.
Nuestros colchones NaturalDream, están minuciosamente pensados para cada etapa del desarrollo, con la altura precisa y necesaria, cuidando siempre el medio ambiente.

Nuestros niños pequeños pasan de 10 a 14 horas al día durmiendo y jugando en un colchón de cuna. Además, en cada respiración un niño inhala aire a no más de seis pulgadas de estos químicos. Como tal, durante los primeros años de la vida de un niño, el colchón es el objeto más destacado en el entorno del niño.